To read in English, click: All invited to Dia de los Muertos celebration Nov. 9
La comunidad mexicana de Ocracoke invita a todos a experimentar una de las celebraciones más representativas de su cultura, el Día de Muertos, en una reunión que tendrá lugar de 4 a 7 p.m. el domingo 9 de noviembre en el Centro Comunitario.
El Día de Muertos es una celebración mexicana que honra a los seres queridos y ancestros fallecidos, incluyendo a las mascotas.
Se colocan fotografías de los seres queridos fallecidos en el altar, así como objetos personales para que los espíritus se sientan cómodos y reconocidos.
Todos están invitados a traer una foto para colocar en el altar de un ser querido o ancestro fallecido, junto con un pequeño plato de comida que le gustaba o un objeto que fuera especial para él o que lo represente.
Pueden llegar a partir de las 2 p.m. para colocar los objetos en el altar.
Una charla sobre la tradición, a cargo de Alfonso Pioquinto Escobar, comenzará a las 4:30 p.m., después de la cual los asistentes podrán reflexionar sobre sus seres queridos, hacer preguntas y socializar.
Esta tradición tiene sus raíces en las civilizaciones azteca y maya. Estas culturas creían en la vida después de la muerte y en que los muertos regresarían a la tierra en ciertos días del año.
La celebración actual se fusionó con la tradición católica del Día de Todos los Santos y el Día de los Difuntos, introducida por los conquistadores españoles.
El Día de Muertos se celebra el 1 y 2 de noviembre de cada año, siendo el 1 de noviembre el Día de los Inocentes, en honor a los niños fallecidos, y el 2 de noviembre el Día de Muertos, en honor a los adultos fallecidos.
La celebración ha trascendido las fronteras de México y se celebra del 1 de octubre al 1 de noviembre, pero el evento de Ocracoke se realizará la semana siguiente debido a otros eventos que tuvieron lugar en Ocracoke el fin de semana anterior.
En esta tradición, se construye un altar, u ofrenda, para honrar a los muertos, decorado con flores, velas, incienso, fotografías y objetos personales.
Tradicionalmente se utilizan flores de cempasúchil, ya que se cree que guían a los espíritus de los muertos hacia el altar.
Se preparan comidas tradicionales, como pan de muerto, mole, tamales, frutas y dulces, y las familias se reúnen para recordar a sus seres queridos. El 9 de noviembre habrá comida para todos, pero se invita a los asistentes a colocar una pequeña muestra de la comida que disfrutaba su ser querido en el altar y a traer algo más para compartir con el grupo, al estilo de una comida compartida.
Se encienden velas para guiar y simbolizar la luz que ilumina el camino hacia el más allá.
Se quema incienso para purificar el ambiente y atraer a los espíritus.
Ofrecer esta celebración para todos es una forma de encontrar puntos en común, señaló el músico isleño Lou Castro.
“Si quieres conocer a alguien cultural y personalmente, aprende sobre lo que es importante para esa persona y las cosas que celebra”, dijo. “Si podemos hacer eso, veremos que tenemos más cosas en común que diferencias”.





